Esta semana he quedado finalista en el concurso de Microrrelatos de Radio Castellón, con este microcuento. Por supuesto, me ha ganado el gran Nicolás Jarque.
VERANO

No cuento hasta diez, ni siquiera hasta cinco. A la de tres, me tiro. Tengo que ser valiente, como quiere papá, que no deja de mirarme desde abajo. Venga, allá vamos. No tengo miedo. Una, dos y... Mamá y mis hermanas también me está observando. Incluso el abuelo. Escucho sus voces: "Salta a la piscina, Tomás, no pasará nada." Cierro los ojos, para no verles y me concentro. Venga, ya me voy a tirar. Pero, ¿por cuál número iba?
Todavía me estoy preguntando cuándo aprenderé yo a tirarme de cabeza a una piscina... jeje, de momento, me conformo con hacer la "niri nana" cada vez que me acerco a una orilla y me tiro de pies.
ResponderEliminarPero bueno, nadar es un deporte sano, aunque nos dé miedo el agua.